Cada boda es una historia diferente. Hay de muchos tipos: religiosas, civiles, serias, desenfadadas … En éste caso fue una boda ibicenca. Ellos lo tenían claro, que mejor que la playa para realizarles el postboda. Así que allí nos fuimos. Una playa desierta (o casi, ya que sólo había una bañista ) era todo lo que nos hacía falta. Terminamos todos dentro del agua, yo incluido, pero es parte de nuestro trabajo. Nosotros no tenemos problema en mojarnos o en ensuciarnos para sacar la foto que estamos buscando.

 

 

           

 

One Comment

  1. teníamos claro que es lo que queríamos y superasteis nuestras propias expectativas.al principio no me gustó la idea de mi marido de hacer la postboda, pensaba que se perdería la magia del momento. pero todo lo contrario. lo que perdimos fue la tensión, los nervios y la vergüenza del dia D.y encima me pude volver a poner el vestido!jjj. estuvimos relajadísimos y lo pasamos bomba! bajo mi punto de vista queda reflejado con gran maestría en esta sesión que presentas. gracias por hacer que dentro de cincuenta años podamos seguir recordando la magia de aquel dia.

Deja tu mensaje

× ¿Cómo puedo ayudarte?